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VICTOR INGRASSIA   INFOBAE   LINK A NOTICIA ONLINE

Distintas empresas, pymes, organizaciones, fundaciones, emprendedores privados e interesados particulares, demostraron el potencial de esta nueva herramienta al alcance de todos en una nueva feria organizada por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires.

Toda la creatividad que pueden tener alumnos de un instituto tecnológico, sumado a la de interesados de distintas pymes del país, más estudiantes de otras universidades y público en general se dieron cita hace unos días en la Semana de la Impresión 3D.

La iniciativa, que tuvo lugar en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) despertó la curiosidad de cientos de personas, alumnos y profesionales que se acercaron para observar y experimentar en forma libre y gratuita lo último de esta tecnología en el país.

En el evento se dieron a conocer proyectos y emprendimientos que abarcan el uso de esta tecnología en campos tan diversos como la industria y la salud. Y allí los asistentes llevaron sus proyectos para realizar impresiones 3D de forma gratuita, una tecnología que está revolucionando los paradigmas de muchos negocios e industrias.

 Sebastían Mur Director del Departamento de Ingeniería insdustrial del ITBA, explicó a Infobae sobre las distintas aplicaciones de la impresión 3D, su futuro y el alcance de la feria organizada en Buenos Aires.

“Esta es la Semana de la Impresión 3D del ITBA, en su segunda edición. El año pasado duró 4 días y reunió a más de 600 personas. En este año se hace solo 2 días, donde uno es dedicado a la industria y el otro de la medicina”, dijo Mur y enfatizó que “esta tecnología necesita más difusión y que llegue más a la gente ya que tiene infinitas aplicaciones y muy pronto cambiará el paradigma de trabajo en el mundo”.

Para observar el crecimiento de la técnica #D, los alumnos de Ingeniería industrial tenían acceso a esta tecnología en el ITBA para ayudarlos en sus carreras. Pero desde este año, decidimos que esté disponible para todos aquellos que quieran utilizarla para su currícula, ya que la tecnología 3D tiene un gran potencial en todas las ramas de las carreras.

Lo que hacen las impresiones 3D es aproximar a los alumnos al proceso ideal de diseño, con prototipos reales. Primero lo confeccionan en telgopor, luego madera y finalmente en computadora y eso lo trasladan al 3D”, resaltó Mur.

Anteriormente, en el ITBA todo se hacía y se mandaba a hacer en modelos de madera. Un modelo de una pieza de automóvil puede tardar cuatro días en hacerse y costar 1000 pesos. Con una impresora 3D la misma pieza tarda una hora en imprimirse y cuesta unos 45 pesos. Las ventajas son muchas.

“Hoy tenemos a unos 200 alumnos en el curso Taller de Modelizacion de Productos, y allí la intención es prepararlos para que adopten todos los conocimientos innovadores que se llevan a cabo en el mundo y lo potencien en sus estudios y carreras, para replicarlo en un futuro a la industria local”, sostuvo el referente del ITBA.

Y agregó: “Buscamos ser un referente nacional en la utilización de la impresión 3D para la industria y la medicina en el país y en la región. En el país falta realizar ese salto tecnológico que ya se está utilizando masivamente en el mundo respecto a esta forma de crear cosas”.

Para ello queremos que las empresas se acerquen al ITBA y consulten la mejor forma de implementar esta tecnología para abaratar costos, ahorrar tiempo y mejorar su productividad. La misma puede recaen en industrias que trabajen con goma, láser, calor y termoplásticos. Hacia fin de año vamos a adquirir una impresora 3D para metales”, remarcó.

Jorge Leporati, Coordinador del Laboratorio del Centro de Prototipado del ITBA explicó a Infobae los alcances del desarrollo del encuentro de impresión 3D: “La impresión 3D está revolucionando los paradigmas de muchos negocios e industrias. En los procesos industriales se están abaratando y acelerando las mejoras y los nuevos desarrollos. También genera ahorros y cambios en la manufactura de productos finales”.

Aquí se imprimieron desde dedos humanos hasta prótesis de huesos de mano y cráneo. Además hubo charlas temáticas específicas de industrias dados por profesionales que trabajan en diferentes ámbitos y esta tecnología le es sumamente útil”, precisó Leporati.

Y agregó: “Vemos que cada año hay más compromiso y recepción del lado del público para adoptar esta tecnología. Por ejemplo, los alumnos de bioingeniería que reciben esta capacitación, aplican estas herramientas en sus estudios médicos. Se siente partícipes de esta revolución y la adptan para imprimir soluciones quirúrgicas”.

El prototipado tiene muchas áreas. Y pasa al ámbito de manofactura aditiva (de la nada construyo algo), creando un material que antes era solo una imagen en la computadora. Esto también permite crear piezas individuales y corregirlas en un modelo experimental, evitando un proceso productivo industrial caro, lento y trabajoso.

“Uno de los ámbitos donde su uso representó uno de los mayores avances fue en la salud, gracias al desarrollo de prótesis, simulaciones quirúrgicas y hasta injertos de piel. Es por eso que este año decidimos también enfocarnos en cómo la impresión 3D aumenta la productividad e impacta en este sector”, concluyó el profesor del ITBA.